DE EPISTEMES Y PARADIGMAS

10.5.05

LA POSMODERNIDAD

Actualmente, proliferan, los conceptos de ‘tiempos de cambio’, ‘tiempos de transición’, ‘cambio de época’ . Proliferan las nociones de ‘fin’, ‘post’ , ‘inter’ , ‘multi’. Como el fin del colonialismo, el fin del subdesarrollo, la caída de las ideologías, o el fin de la historia, la era de acuario, o el new age. Estos conceptos, reales o no, nos dan una idea acerca de cómo percibimos la sociedad actual.

Bien podríamos pensar que todo esto es una equivocación. Un equívoco que ha sido producto de la mala asimilación de la aceleración de las comunicaciones, y el impacto del desarrollo de la técnica. Sin embargo, tenemos razones para llegar a pensar que existen pensadores que se identifican con una perspectiva llamada Postmoderna; que bien podría servirnos de marco de referencia para interpretar hechos sociales que hasta el momento no tenían explicación.

Jean Francois Lyotard, considerado uno de los maestros del tema señala que la modernidad está agotada, que la idea y proyecto de la modernidad, con sus fines de libertad, socialismo, o igualitarismo han sido destruídas, o más bien reemplazadas por los éxitos del mercado. En consecuencia, es el fracaso de la historia universal, entendida que como el relato total de la humanidad y de todos sus relatos emancipadores.

Por otra parte, se señala el fracaso de la idea de pueblo como rey de la historia, como base de la soberanía popular, así el neocapitalismo no sería más que otro totalitarismo, sólo que este no busca legitimidad, ya que no es metafísico, sino empírico-pragmatista.

Planteamiento del problema

Ha pasado mucho tiempo ya desde que las primeras críticas al modernismo fueron formuladas tempranamente por escritores y artistas a comienzos del siglo. En aquellos días se temía en gran medida a los horrores de la guerra.

Actualmente, ya aceptado el paradigma Modernista como una etapa necesaria en el desarrollo de las sociedades, surgen pensadores que manifiestan en forma de denuncia los fenómenos que afectarían a la cultura occidental como la conocemos. Así, el advenimiento de la modernidad no sólo integra una forma de organización política y económica, sino que también implica un ‘estilo de vida’ característico, una nueva valoración de las cosas, y nuevos ideales de hombre. Hablamos de un hombre humanista, progresista, urbano, e individualista.

La perspectiva postmoderna se presenta como una alternativa frente a los conservadores postulados modernistas, en cuanto a develar o denunciar los productos sociales del actual orden.
La postmodernidad es un conjunto de proposiciones y denuncias acerca del estado actual de las sociedades. Denuncia los productos y consecuencias del ‘Proyecto moderno’, al tiempo que manifiesta la irrefutable consolidación de un modelo económico neocapitalista liberal y multicultural. En consecuencia, ella no es una propuesta teórica, ni tampoco es un nuevo modelo de sociedad ideal o utópica. Si devela una realidad actual, que sirve de marco de referencia para iterpretar determinados fenómenos sociales.
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La ilustración es quizás el periodo histórico de mayor encanto y esperanza, en donde se pone en juego la salvación del espíritu humano, pues fue sobrepasada la perspectiva salvífica en nombre del desarrollo y el progreso, depositando su confianza en la exacerbación en el uso de la razón, lo que a través del discurso imperante (empirismo científico), sentarían las bases de la verdad.

Si tuviéramos que definir la Ilustración entonces diríamos que esta no es más que la liberación del hombre de su propia culpa, la capacidad de valerse por sí mismo sin la ayuda de otros, la cual no se traduce en una incapacidad intelectual sino más bien en la falta de valor, de independencia en la toma de decisiones.

Para Kant la pereza y la cobardía son culpables de que gran parte de la los hombres continúen a gusto en su estado de pupilo. http://www.geocities.com/fdomauricio/Ilustracion.htm Por tanto, pareciera que la Ilustración no quiere mas que una cosa, La libertad, y la más elemental de todas hacerse uso publica de su razón íntegramente. Si tuviéramos que sintetizar el sentido la ilustración esta no es más que la valoración de la razón en las relaciones sociales, políticas, económicas de un período histórico (aún vigente), enmarcado por grandes ideales:

Igualdad; Justicia; Confianza el progreso (económico); Confianza en la ciencia; Humanismo; Declaración de los derechos humanos (económicos-sociales/civiles-políticos); Libertad de conciencia; Universalismo; y, Racionalismo.

Depositados en lo que denominaríamos como el esfuerzo de la legitimidad de la ciencia (relato de la modernidad), discurso imperante que desplaza toda forma alternativa de relato. Una vez alcanzada la verdad, encontraríamos la libertad, fin último de la Ilustración. Las ideas sustentadas por la Ilustración son la génesis del siguiente período, y a la vez fundamento de la postmodernidad nos referimos a la modernidad.
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http://cv.uoc.es/~991_04_005_01_web/fitxer/perc86.html http://cv.uoc.es/~991_04_005_01_web/fitxer/perc84.html

Los principales teóricos de la modernidad utilizan concepciones bipolares, para explicar el proceso de evolución de las sociedades. Durkheim establece el quiebre entre la solidaridad mecánica – solidaridad orgánica. Por su lado, Tönnies devela el paso de la comunidad a la sociedad, por tanto la modernidad es un hecho concreto.

La postmodernidad

El Postmodernismo expone las ideas de pensadores como Jean Francois Lyotard, Fredric Jameson, Augusto del Noce, Norbert Lechner, y Jean Baudrillard, entre otros. Así, la Postmodernidad representa una ruptura con la sociedad moderna, ya que ésta sobreviene tras la modernidad; razón por la cual resulta difícil diferenciarlas sin apelar a fuentes necesariamente filosóficas y estéticas.

En consecuencia, la Postmodernidad representa el fin de la modernidad o el fracaso del proyecto moderno. Esta perspectiva es una imagen pesimista y crítica de la sociedad. La modernidad se consideraba altamente racional y rígida, mientras que el postmodernidad parece más irracional y flexible.
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En general, no existe un gran acuerdo entre los autores en torno a la descripción de la sociedad postmoderna, pero Lyotard la ejemplifica de la siguiente manera: “El eclectisismo de la cultura general contemporánea: escuchamos reggae, vemos una película del oeste, vamos a almorzar a McDonald y a cenar a un restaurante local, llevamos perfume parisino en Tokio y ropas ‘retro’ en Hong Kong; el conocimiento es un asunto de los concursos televisivos. Es fácil encontrar un público para obras eclécticas. Convertido en kitsch destinado para el gusto popular, el arte alimenta la confusión que reina en el gusto de los patrones. Los artistas, los propietarios de las galerías de arte, los críticos y el público nadan juntos en el ‘todo vale’ y la indiferencia reina en nuestra época”.
[1]

Jean Francois Lyotard en su obra “La Condición Postmoderna” ofrece una clara visión acerca del conocimiento en la sociedad actual, según el autor, postmoderna. Nos señala que las grandes ideas emancipadoras son reemplazadas por los éxitos del mercado. Cabe destacar que, “No existe una ‘teoría social postmoderna’ unificada, sino una pluralidad de teorías y posiciones postmodernas diferentes”[2]; por lo que nos encontraremos con distintas definiciones de un mismo fenómeno.

La teoría postmoderna se manifiesta en una amplia en una amplia variedad de campos como el arte, las comunicaciones, la filosofía, y las relaciones sociales, entre otras. Lyotard, señala que se carece de una teoría para explicar la realidad y las características de la sociedad. El autor se preocupa principalmente del Conocimiento. Para él existen dos formas de saber, el científico y el narrativo. Y agrega que ambos necesitan una legitiman en metarelatos, retomando la tradición de Wittgenstein acerca de la relevancia de los juegos del lenguaje.

Estos ‘juegos de lenguaje’ son distintos en el saber científico y narrativo. El saber narrativo adquiere importancia al ser transportados de generación en generación, llegando a considerársele como el génesis del conocimiento vulgar o tradicional.

Y los relatos científicos reniegan de cualquier forma narrativa distinta o alternativa, aceptando sólo el lenguaje científico, el cual recurre a dos tipos de narraciones diferentes. Por una parte, el discurso filosófico (el idealismo de Hegel), y por otra parte, un discurso político (los valores de la revolución francesa y la ilustración). El saber del científico siempre se legitima en función de la justicia, del humanismo, la libertad, el progreso, el desarrollo; "solo por conocer", y para formar seres humanos íntegros; su objeto sería generar igualdad.

Actualmente, en una sociedad multiétnica, con diversas subculturas la función del metarrelato no es creíble, y cae en descrédito. Porque, justamente, ahora predomina la valencia pragmática de la tecnología (Heidegger y su ‘Ciencia y técnica’).

El autor agrega que posteriormente a la segunda guerra mundial, y patrocinada por las empresas capitalistas norteaméricanas, se produce la perdida de credibilidad de los metarelatos (capitalismo y comunismo), por tanto, en tiempos postmodernos lo que impera es una multiplicidad de micronarraciones en contraposición a un modelo de lenguaje homogéneo.

De modo que su denuncia es que la ciencia no busca, ya, la verdad sino la performatividad, es decir el desempeño y el rendimiento. Lo que genera una crítica al papel de las ciencias en tiempos postmodernos. Llegando a preguntarse: ¿para qué sirve ésta verdad?.

Ya no se busca el saber por el saber del sabio, sino que ocurre un cambio de status de saber, ahora deviene en instrumental en términos parsonianos. Sólo el saber útil es valorado, es un valor de cambio, y por supuesto, no tiene valor de uso. En consecuencia, la enseñanza universitaria no es más que una institución que prepara los mandos altos y medios en puestos nada más que funcionales.

El saber se caracteriza en la sociedad postmoderna, por ser susceptible de ser almacenado en máquinas de lenguaje, y procesado como dato, al punto que la disponibilidad de la información posibilita el uso del poder. El estado se miniaturiza porque no maneja toda la información a diferencia de las multinacionales. Pero sí, el estado respalda al tipo de ciencia en curso en su rol legislador ético y legal.

Lo que pretende manifestar, Lyotard, es la develación de la pérdida del sentido de las ciencias, presionada por el mercado, lo que generaría la mercantilización de las relaciones científicas perdiendo la inquietud de conocer la humanidad por el simple hecho de conocerla.

Pero las relaciones sociales también se ven afectadas. El lazo social sólo se constituye en el juego de lenguaje reconocible entre los iguales. Ahora todo es información. Las masas de actores dado que se descomponen, pierden la noción de sí mismo, se desvanece. No habría pasado, ni futuro. Ni utopía, ni historia; sino, sólo el aquí y el ahora.

En otro sentido, Fredric Jameson señala que la postmodernidad es la lógica del Capitalismo Avanzado. Destaca Jameson, que en los últimos años se caracterizan por el fin del ideal, del arte, el fin de las clases sociales (o redistribución de las clases), el fin del marxismo y de la socialdemocracia, es decir, tiene la convicción final de todo.

Desde el expresionismo abstracto, el existencialismo, y la escuela moderna de arte; pasando por el Op art, Pop art, la síntesis de lo clásico y lo popular. Se habla, ahora del triunfo de la postmodernidad en la arquitectura, o más bien del Diseño, que se presenta como una cultura comercial o de masas, que se fascina con lo Kitsch. Debiendo en una cultura de la publicidad y el cine B.
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http://www.brujula.net/wiki/Kitsch

La postmodernidad obedecería a la sociedad electrónica, la sociedad postindustrial, y alta tecnología, de modo que en ésta sociedad ya no se relaciona con los postulados del capitalismo clásico. Del mismo modo ocurriría en el arte, que ahora no sería más que una proposición de protesta para expresar el fetichismo de la mercancía. El material del arte es oscuro, sexual, provocador y transgresor de todo lo imaginable.

El arte postmoderno se caracterizaría por su superficialidad basada en la cultura de la imagen, la neutralidad valorativa, y el simulacro. Potenciado por el debilitamiento de la historicidad oficial auspician la nueva tecnología, la desconstrucción de la empresa, y la mercantilización de todos los objetos. Por tanto, en el arte actual, lo insípido y la falta de profundidad hacen surgir un nuevo tipo de superficialidad que provocaría el ocaso de los afectos, y la muerte de las oposiciones, como esencia/ apariencia, o el significado/ significante.

Todo es sustituido por la múltiple superficie y la ausencia de profundidad. Su consecuencia sería la euforia y la autoaniquilación. No hay un grito, sólo finales prematuros y autodestrucción, drogas y esquizofrenias.

Jameson anuncia el fin de la mónada y el ego. Pero también, habla de una rapiña de todos los estilos estéticos. Así destaca una moda nostálgica y un gusto por lo pastiche (patchwork), es decir, se crea un nuevo espacio en donde el todo convive con todo, en un mismo lugar. En suma, todo esta permitido, mientras sea ejecutado en su propio ‘metro cuadrado’.

CONCLUSIÓN

Al parecer las ciencias sociales se hayan mal dotada para las preguntas post-modernas, las cuales se relacionan con puntos de vista muy cambiantes y fragmentados, y por supuesto, se relaciona, también con el lenguaje, y los problemas de plurivocidad de sus significados. La sociología ya no se presenta con objetivos epopéyicos, sino solamente busca un lugar en la realidad social para comprender la realidad sociocultural.

Ahora, más que nunca necesitamos instrumentos de análisis, de interpretación que nos permita aproximarnos a explicaciones significativas de nuestra situación histórica. La expansión incontrolada de nuevos conceptos nos ha llevado a preguntarnos: ¿Qué es la posmodernidad?. Al parecer no podemos definirlo, sino a través de sus características, o como señala Giddens, las llamadas "consecuencias de la modernidad".

La pérdida de confianza, la falta de compromiso, la desesperanza, la falta de valores homogéneos que mantengan el equilibrio tanto social como individual son quizás las características más relevantes de la condición postmoderna. Pareciera desde esta perspectiva que las grandes esperanzas depositadas en la Ilustración están siendo objeto de distintas críticas bajo diferentes enfoques (filosóficos, comunicacionales, del poder, entre otros), la ciencia ya no nos entrega las ilusiones que una vez nos prometió, la verdad es la misma lo que cambia es la utilización de ésta.

La modernidad es un hecho ya aceptado. El modelo económico imperante es el ejemplo más claro que el desarrollo industrial basado en la implementación del capitalismo como eje conductor de la acción social, acción que se traduce en la utilización de la ciencia como modelo lingüístico unificador.

Por tanto, la postmodernidad no es más que una crítica emprendida por distintos sectores y pensadores por develar la falta de coherencia entre las promesas ofrecidas por la Ilustración, la felicidad es la eterna meta o una realidad tangible. Así en la sociedad postmoderna lo que sucede es que los grandes metarelatos no tienen credibilidad, por lo que se dice que hay una crisis de metarelatos.

En suma, “el postmodernismo presenta cuatro grandes características relevantes para el movimiento hacia nuevas síntesis en sociología. En primer lugar, el rechazo a la anterior búsqueda de una única y gran teoría sintética. En segundo lugar, la aceptación de una gama de esfuerzos sintéticos de menor alcance. En tercero, la destrucción de las fronteras disciplinares y a la idea de que las nuevas síntesis pueden inspirarse en ideas pertenecientes a varias disciplinas diferentes. En cuarto, la desmitificación de la retórica teórica, que permite a los sociólogos tomar prestadas libremente las ideas de otros para crear teorías sintéticas”
[3].

En consecuencia, la pregunta central que se nos plantea es: ¿De qué metarelatos debe valerse la sociología para responder a las inquietudes postmodernas? . Es decir, ¿Cómo se debe responder a las inquietudes postmodernas sin la ayuda de los metarelatos?. Si éstos carecen de validez y legitimación, de antemano.

Notas
[1] Lyotard Jean Francois, “La Condición Postmoderna- informe sobre el saber”, 4° edición, 1989, p. 76.
[2] Ritzer, George, “Teoría sociológica contemporánea”, 1993, Mc Graw Hill, p. 566.
[3] Ritzer, George, Ibid, p. 569.